In Alcaldesa, Igualdad, Mayte

Nueve niños saharauis pasan sus últimos días en Puertollano gracias al programa “Vacaciones en Paz” gracias a ocho familias de acogida, pero también al apoyo económico de la Diputación Provincial y la colaboración económica del Ayuntamiento que ha aportado 3.000 euros para el desarrollo de diversas actividades durante este verano.

Tan solo tres de los nueve niños han repetido la experiencia y el resto son hermanos de otros que ya lo vivieron. Hasta el 4 de septiembre tendrá la oportunidad de disfrutar del cariño de sus familias de Puertollano con las que han compartido tantas experiencias, como ha subrayado la alcaldesa, Mayte Fernández, durante la recepción en el Salón de Plenos y entregarles una mochila bien cargada de material escolar para el inicio del nuevo curso.

Gracias a la aportación del Ayuntamiento, indicó la concejal de integración, Gloria Mohedano, han tenido ocasión de participar en diversas actividades, tanto de encuentros semanales, un campamento de la Dehesa Boyal y tres jornadas de convivencia en una casa rural.

Como relata Luisa López, del Comité Local de ayuda al pueblo saharaui, durante su estancia se ha intentado cuidarlos lo máximo posible, que se sientan como en casa, han pasado la correspondiente revisión médica, una de las niñas incluso ha tenido que ser operada, e incluso Optica Madox ha proporcionado gafas gratis a aquellos que lo han necesitado.

“Vacaciones en paz” sale adelante gracias a la Diputación Provincial que se hace cargo de los gastos de transportes de los niños, pero sobre todo las familias de acogida que hacen posible que cada año sea una realidad.

Descenso del número de acogidas

Según reconoce López el número de acogidas ha descendido de forma progresiva a lo largo de los últimos años en todo el territorio nacional coincidiendo con la crisis, y se ha pasado de 11.000 niños hace un cuarto de siglo a tan solo 4.500 durante este año, sobre todo a la falta de implicación de muchos municipios y diputaciones que ya no costean el viaje de los niños. “Hay muchas familias que se interesan, pero muy pocas las que dan el paso de acogida, no es un coste muy elevado, pero la gente es una responsabilidad tener un niño porque vienen con lo puesto y hay que tener una base económica para comprarle ropa y atenderles médicamente”.

 

 

 

 

 

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