Las obras de reforma y modernización del bloque quirúrgico del hospital “Santa Bárbara” de Puertollano programadas por el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha prosiguen su curso según el plan establecido, de tal forma que los trabajos a realizar en los accesos a la UCI y la zona de esterilización ya han finalizado.
El proyecto, en el que el Gobierno regional invierte más de 250.000 euros, contempla dos actuaciones, dotar a las unidades de cuidados intensivos y de reanimación de sistemas de alimentación eléctrica ininterrumpida y reformar completamente el quirófano cinco y, por otro lado, sustituir buena parte de los falsos techos de la zona donde se ubican los otros cuatro quirófanos y del anillo perimetral.
Para llevar a cabo estas actuaciones, los técnicos del hospital diseñaron un plan de trabajo dividido en cuatro fases, la primera de las cuales comprendía las actuaciones citadas en la UCI y la zona de esterilización, que en ningún momento debía entorpecer el funcionamiento diario del centro.
Para lograrlo, se establecieron accesos, ascensores y pasillos separados para los profesionales sanitarios y pacientes y los trabajadores y materiales de obra gracias al cual se mantienen operativos durante la semana tres quirófanos para llevar a cabo las intervenciones programadas. Esto obliga a separar también la zona en la que se están desarrollando las obras del área quirúrgica y a adoptar medidas para evitar una posible contaminación. Por esta causa, el paso previo al inicio de cualquier trabajo es proceder al aislamiento completo del área.
Así se hizo a principios de julio cuando comenzaron las obras: lo primero fue aislar la zona de trabajo, incluido el espacio por encima de los falsos techos, y a continuación se limpió él área quirúrgica y comprobaron sus condiciones con un medidor de partículas; acto seguido se sellaron las posibles fugas en el aislamiento y se volvieron a evaluar las partículas en suspensión. Hasta que el medidor no corroboró la ausencia de contaminación no comenzaron los trabajos de desescombro ni las intervenciones quirúrgicas.
Estas precauciones se repitieron hace un par semanas al comienzo de la segunda fase, en la que se está actuando en la zona adjunta a quirófanos y en los vestuarios femeninos, como pudo comprobar el director provincial de la Consejería de Sanidad, Francisco José García Sánchez, durante la visita que esta semana hizo a las obras.
El gerente del Área Integrada de Puertollano, Cesáreo Peco, informó al representante del Gobierno regional que el plan de trabajo se está cumpliendo y que en los primeros días de agosto comenzará la tercera fase, que comprende la reforma del quirófano cinco, del paritorio y del vestuario masculino. Si no surgen contratiempos, las obras estarán acabadas a mediados de septiembre.