La Junta de Gobierno Local ha aprobado el expediente de contratación, mediante procedimiento abierto, de las obras de ejecución y mantenimiento de la Fuente Agria, uno de los monumentos más emblemáticos de Puertollano.
Una actuación integral que se extenderá durante dos meses y a la que se destinará 60.000 euros con cargo al Plan Extraordinario de Obras Municipales Diputación Ciudad Real 2019
El portavoz del equipo de gobierno, Félix Calle, aseguró que la Fuente se respetará tal y como está y los serán los técnicos municipales valorarán si se puede coger agua a la vez que se desarrollan los trabajos, que deberán estar concluidos antes del 31 de diciembre. “Vamos a intentar entorpecer lo menos posible y evitar molestias a la ciudadanía”.
Se trata de una fuente de estilo modernista de 1905 y quince años más tarde sufrió su primera restauración de una estructura que combina hierro forjado y madera y con un solado de granito.
Intervención de pintura y renovación de maderas
La intervención sobre la Fuente Agria conllevará trabajos de pintura, renovación y tratamiento de las maderas de la techumbre, limpieza de solado y rejillas, que en todo caso no alterarán su estructura, afirmó Calle. “Será un lavado de cara muy profundo” y que forma parte del plan del equipo de gobierno de conservación, difusión y protección de la identidad y del patrimonio local.
La restauración supondrá la eliminación de las capas de pintura existentes y posterior pintura; decapado de los elementos de madera del techo, limpieza del polvo mediante aire a presión y aspirado; tratamiento del techo de madera con imprimación insecticida, fungicida y termicida, transparente e incolora; acabado con barniz sintético; revisión de la cubierta consistente en la limpieza de canalones, reparación de encuentros, partes sueltas y fijación de las necesarias, así como la sustitución de las rejillas de desagüe.
Una Fuente con historia
La Fuente Agria va ligada a la historia de Puertollano, Ya en el siglo XVI diversos documentos reflejan la existencia de una Fuente Aceda, aunque será el doctor Limón uno de los principales valedores y sobre todo de sus propiedades medicinales.
La fama del agua ferruginosa crece y se construye un balneario, la actual Casa de Baños, a la que acude el General Narváez, e incluso llega a embotellarse y distribuirse por todo el país.
