Puertollano con el Santo Voto se reencuentra con su pasado, con su promesa más antigua que mantiene viva seiscientos setenta años después. Muchos puertollaneros han acudido a la glorieta de la Virgen de Gracia a la una en punto de la tarde para conseguir una de las cinco raciones que se han repartido en esta fiesta declarada de interés turístico regional.
Tras la función eucarística de renovación del Voto a la Virgen de Gracia, el propio párroco, Pedro Crespo, era el encargado de bendecir las ollas en las que se ha guisado este sabroso estofado que ahora muchos degustarán junto a sus familias.
La alcaldesa, Mayte Fernández, junto a la presidenta de Santa Agueda, Ana Valderas, y un representante del Club Paralímpico eran los encargados de iniciar el reparto en una olla de barro del Voto.
Conjura para avanzar y progresar unidos
La alcaldesa, Mayte Fernández, manifestó que mantener esta tradición tiene mucho que ver con la identidad de Puertollano, que nos explica la solidaridad, el trabajo en equipo, la unidad, el esfuerzo que mantiene vivo un pueblo, y “desde luego hoy rememorar y volver con una promesa de superación que tiene mucho sentido”.
Asimismo aseguró que cuando Puertollano está fuerte, dispuesto y unido, cuando la gente tiene ganas de superarse, ”lo consigue siempre y así lo hemos demostrado durante 670 años”.
Fernández apeló a la unidad de todos en un escenario muy positivo para la ciudad que se “conjura para avanzar y progresar, tenemos proyectos encima de la mesa que necesitan de infraestructuras que están pendientes de ejecutar”.
Firma del Convenio de Comarcas Mineras
Asimismo recordó que Puertollano recibirá 10 millones de euros de los fondos europeos DUSI para hacer realidad diversos proyectos de modernización de la ciudad, y reivindicó la firma del convenio de comarcas mineras después de que el Gobierno de Castilla-La Mancha se haya puesto a disposición del Gobierno España para la rúbrica que posibilitaría la mejora de infraestructuras con el fin de promover la industria y el empleo. “Necesitamos la ayuda y el compromiso de las instituciones para que Puertollano no pierda las oportunidades que se abren”.
Un recetario con mucho cariño, mucho calor y mucha leña
Culminaba así una larga e intensa jornada de trabajo y preparativos, de remover el guiso, de trasiego de ollas, de envasado de cada una de las raciones y sobre todo tener todo a punto para el inicio de reparto al que han acudido cientos de personas en una larga fila que se extendía por el Paseo de El Bosque.
El equipo de José Angel Sánchez Maya comenzó la preparación del guiso a las seis y media de la mañana a cargar la veintena de ollas con carne y sofrito y cada una con la cocción necesaria, desde media hora a dos horas para que la receta estuviera su punto antes de echar la patata.
Sánchez Maya explicó que se trata de un estofado tradicional y lo más casero posible, eso sí muy bien rehogado, y tanto en su elaboración como en el reparto ha contado con el apoyo de una treintena de personas.
Para su preparación ha utilizado 1.500 kilos de carne de ternera de añojo, 2.400 kilos de patatas, 150 litros de vino, 100 de aceite, 150 kilos de cebolla, 50 de ajo, 50 de zanahoria, 2 de pimentón, 4 de pimienta, 1 de clavo y mucho amor, mucha paciencia y muchas lágrimas “porque se sigue haciendo con leña”, reconocía el cocinero.
Sánchez Maya también ha elaborado otro guiso más tradicional en una Olla del Voto de cerámica, a la brasa de la leña, con un viejo recetario con conejo y trigo como ingredientes y en el que se ha evitado aquellos que aún no se conocían en nuestro territorio, ya que la fiesta tiene su origen en el siglo XIV.
