In Alcaldesa

En estos últimos días de agosto y con el obligado descanso vacacional ya en el recuerdo, la acción del gobierno va cogiendo ritmo de nuevo curso.

En la agenda, que poco se relaja, hay asuntos municipales de todos los niveles, para mi todos importantes y con su peso específico, y entre ellos, un programa especialmente interesante que rescatamos una vez estabilizadas las cuentas y que trata de acompañar al movimiento asociativo de la ciudad en sus actividades.

Un programa humilde, ya que económicamente no llega al 35% de lo que fue, pero en cualquier caso, un programa que tiene una filosofía concreta, un objetivo establecido, una decisión política que responde a la visión de la ciudad que tenemos y que queremos.

La articulación del apoyo económico a las actividades que realizan los colectivos sociales, sanitarios, deportivos, culturales, medioambientales de la ciudad, responden al estilo de un gobierno abierto que entiende la ciudad como un proyecto de todos.

Motivar y promocionar el asociacionismo y hacer un reparto justo de los recursos disponibles forma parte de nuestra visión política de la participación ciudadana y la dinamización de la ciudad, contribuyendo a la construcción de una sociedad activa y comprometida.

En nuestra gestión, es protagonista el movimiento ciudadano, sentimos la necesidad de escuchar permanentemente al mundo asociativo, sean cuales sean sus fines estatutarios. Contamos con cerca de 200 organizaciones de distinta naturaleza que aportan riqueza y añaden valor a Puertollano.

Atender sus demandas, gestionar sus necesidades, poner a su servicio los bienes públicos, es una manera de ser Gobierno. Queremos promocionar el asociacionismo como modelo social de convivencia y colaboración y estamos convencidos de que así, construimos una ciudad más abierta y participativa.

No encuentro ninguna razón que justifique el ruido y la paranoia. Si algo caracteriza a la sociedad de Puertollano es su independencia, su capacidad crítica, el reconocerse como ciudadanos libres, su espíritu luchador y a la vez comprometido.

Tal vez el problema lo tiene quien piensa que se puede comprar un voto, tal vez no conocen a la gente de Puertollano, tal vez no alcanzan a comprender la filosofía política de un proyecto de ciudad y de ciudadanía, tal vez los arboles no les dejan ver el bosque.

Hoy tengo la necesidad de mostrar todo mi respeto a los hombres y mujeres que altruistamente desde sus organizaciones dedican su tiempo a defender aquello en lo que creen, a construir una sociedad mejor, a dinamizar a través de actividades la vida de sus vecinos, a promocionar la cultura, el deporte, el ocio y el tiempo libre, los pájaros, la literatura, el arte, la naturaleza, las setas, el turismo, el entretenimiento, la convivencia, las estrellas, la integración social, la música, el carnaval, la salud, la concienciación ciudadana, la educación, la justicia…. Mi respeto y mi agradecimiento.

Lo único que les puedo pedir a cambio es que continúen su labor con libertad e independencia, que son necesarios y nos hacen ser mejores y que mantengan su espacio en la vida pública porque les pertenece y forma parte de la organización social y democrática de Puertollano.

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