Las pequeñas joyas vegetales que guarda el Paseo de San Gregorio han sido descubiertas en una ruta matinal dirigida por el técnico de medio ambiente, Miguel Serrano, en un itinerario dentro de las actividades programadas en la Semana de la Movilidad.
Los participantes mediante unas claves de identificación a través de las características de las hojas han determinado la variedad arbórea ante la que se encontraban.
El Paseo acoge un amplio número de especies vegetales, desde olmos al árbol del amor, tilos, abetos, encinas, cedros, moreras o acacias. Serrano ha desgranado el origen de su nombre científico, el estado de conservación y su aplicación medicinal en determinados casos.
Árbol centenario
Una ruta en la que los asistentes han conocido curiosidades como el árbol más antiguo del Paseo, un gran olmo situado detrás de la Casa Baños, posiblemente plantado en la época de Isabel II, cuando encargó entre 2.000 y 3.000 árboles para dar vida al entorno de este balneario.
También explicó detalles como el tratamiento menos agresivo y químico que se realiza para tratar la plaga de Galeruca mediante la aplicación de endoterapia, a través de una inyección de la materia activa fitosanitaria directamente al tronco del árbol, que evita realizar pulverizaciones que puedan afectar a personas y animales.